22 de febrero de 2012

Espacial ♥

Ver tu mirada, aunque tengas una mirada triste, cuando me miras fijamente, como si no hubiera mañana, ver mucha sinceridad. Van a tener razón cuando dicen eso de: "vale más una mirada que mis palabras", porque lo verdaderamente se dice sin palabras. Matarnos a miradas fijas, ver al uno reflejado en el otro, lento, sin tiempo, entregarnos en cuerpo y alma, ver fuego en los ojos.
Observar como poco a poco esa mirada se ve acompañada de una gran sonrisa de oreja a oreja, esa que me gusta tanto, esa sonrisa por la que mataría si es necesario, por la que haría todo lo que fuera para verla una y otra vez, verte feliz.
Acariciar tu espalda, sin perder de vista tu mirada, buscando un par de besos, despacio, labios carnosos, que mis ojos se pierdan. Besos en el cuello, notando tu calor, morderte y que me muerdas. Respirarte en el oído. Agarrarte y abrazarte, fuerte, para que nunca te vayas de mi lado, arañarte para dejarte huella.  Que todo arda, se ven fuegos artificiales y luces de color, se sienten un par de corazones que no quieren parar.
Que me cojas entre tus brazos, sentir seguridad, confianza, como si no me dejaras caer nunca. Que me dejes caer y empezar una lucha, recordando tiempos pasados, como si tuviéramos cinco años, correr, Gran Vía para arriba, Gran Vía para abajo, saltar, pegarnos, reir, ser felices. Tomar decisiones importantes a piedra, papel o tijera.
Manos que se juntan debajo de una par de mesas, besos a escondidas para que el profesor no nos vea. Verte apoyar tu cara en la mesa, apoyar yo la mía, otra vez miradas fijas, intensas, todo se queda tranquilo, ya no se oyen voces, solos en el Universo tú y yo.
Que mis dedos se enreden en tu pelo de león, que tus manos de guitarrista toquen mi piel, me haces cosquillas, pelos de punta. Escuchar tus palabras de poeta, esas que se me clavan como cien cuchillas, que se me marcan a fuego en la cabeza y en el alma, recordarlas en cada momento, sonreir.
Cuando llega la noche, imaginarte rodeándome mi cintura con tu brazo, creer que estás a mi lado, sentirte, sentir tu presencia, tu calor. Dormir, soñar, soñar contigo, dieciocho de septiembre de dos mil diez, futuro, presente y pasado. Despertar, que tú no estés, que todo haya sido producto de mi imaginación, maldecir al mundo por no estar al otro lado de mi cama, en lo oscuro, sentir dolor, tristeza.
Amarte cada día más y más, pequeños detalles que me enamoran, detalles que me enloquecen. 



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